martes, 3 de febrero de 2009

Tronc Ovest


Escribe: Roberto


Podría hablar de muchas cosas.

Podría hablar de aeropuertos y de aviones. De retrasos. De no saber si llegas pronto o tarde o si en tu tarjeta de embarque está la clave de tus sueños o de tus pesadillas. Podría hablar de tipos que bailan salsa en las salas de espera y que hacen reír a las muchachas japonesas. O de chicas gordas que sacan su cuaderno y pintan los rostros de los viajeros.

Podría hablar de una ciudad llamada Florencia, con gigantes perfectos y milagrosos como palomas que aparecen congeladas en las fotos. Podría hablar del Neorrealismo Italiano y de "Arroz Amargo" que me enseñó a Silvana Mangano y a Vittorio Gassman . O de tipos solitarios que desde un pasillo de un lúgubre hospital hablan de cúpulas imposibles.

Podría hablar de trenes italianos y de las montañas que se ven desde sus ventanillas. O de los ojos verdes de una española y el salitre en su mirada que mira las montañas que se ven desde las ventanillas. Podría hablar de montañas rusas. O de despedidas en las puerta de los cines que hacen que te guste la lluvia sólo porque estás convencido de tener paraguas.

Podría hablar de un pueblo llamado Lucca y de Puccini. De murallas oscuras y lluviosas. De gaditanos guitarristas que encienden besos con la chispa adecuada. Del calor de tu cuerpo en la cama. Podría recomendaros el vodka con fresa y las focacce de jamón york, queso y champiñones. O que vayáis a tomaros una coca-cola mirando al río.

Podría irme atrás y hablar y hablar bien de Revolutionary Road y sus grandes actores. O de “El Truco del Manco” y volver al debate de la realidad y de la vida. O irme adelante y valorar una buena gala de los Goya. O volver al tiempo preciso y hablar de ferias de discos y de halcones ingleses y viajes a Darjeeling. O contaros detalladamente cómo es pasear sobre el río con la chica del puente.

Podría hablar muchas cosas y no hablar de nada y mear fuera del blog al no hablar de lo que hay que hablar, de cine. Pero, ¿acaso no hay que vivir para contar?

4 comentarios:

Doacon dijo...

Podrías ser tú, una y mil veces, una vez más...

roberto dijo...

Podría ser él, podría ser yo... En definitiva: PODRÍAMOS SER TODOS EN ALGÚN MOMENTO.

Me ha encantado...

Lore.

Carmen de Águeda dijo...

Un post redondo, sí señor.

Desencantado dijo...

No había visto tu comentario, Carmen. Pero muchas gracias por pasarte por aquí y por pararte a comentar...¡espero que nos sigas leyendo!

Roberto.